Derechos Humanos

Nuevas condenas a barbarie de las FARC

Nuevos pronunciamientos nacionales e internacionales sobre los raquíticos hechos revolucionarios de las FARC en la municipalidad de Toribío, fueron promulgados por todos loe medios de comunicación. “Toribio ha padecido todas las secuelas producidas por la violación a los Derechos humanos y graves infracciones al Derecho Internacional Humanitario por parte de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, Farc”. Hay pedidos para que la Oficina para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja, para que obliguen a las Farc a cumplir de manera estricta las normas de la guerra y del Derecho Internacional Humanitario.

La violación del art. 3 de la Convención de Ginebra, al cometer crímenes de guerra y delitos de lesa humanidad contra la vida e integridad corporal de los habitantes de Toribío, Cauca. “El hecho es que la guerrilla no ha tenido precaución para evitar acciones colaterales, afectando la población civil, aun cuando estaba en búsqueda de atacar un objetivo militar”, sentenció Alfredo Ran­gel, Director de la Fundación Seguridad y Democracia. Esa guerrilla, mediante el uso de armas no convencionales, ha llenado de tristeza, muerte y desolación a esta comunidad indígena destruyendo importante infraestructura necesaria para el diario vivir de los civiles indígenas.

Las mujeres que forman la Ruta Pacífica, movimiento nacional feminista imntergado por 350 organizaciones pacifistas, antimilitaristas, que trabajan por la no violencia y la solución negociada del conflicto armado, exigen respeto por la población civil, reconociendo y respaldando la postura de la población indígena del Cauca. Por su parte, Naciones Unidas acusó a las Farc de sentir “un total menosprecio por la vida, la integridad y la seguridad de los civiles”. Amnistía Internacional, en declaración divulgada en Bogotá, aseguró que “las Farc pusieron en peligro a la población civil al usar cilindros de gas, un método que sólo puede calificarse de violación deliberada del Derecho Internacional Humanitario”.

La opinión generalizada de los colombianos no es la de que las Farc no están consumando ningún acto revolucionario, sino despejando el camino de la cocaína al pacífico. La brutalidad predominante en los mandos de las Farc al violar sistemáticamente los derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario al desprecio de los organismos nacionales o internacionales que antes venían en ellos visos políticos y de posible redención del pueblo necesitado del país. Amnistía Internacional que en años anteriores era casi aliada de ellos como grupos de extrema izquierda, hoy condena irremediablemente sus actuaciones de crueldad máxima.

LAS FARC UN EJEMPLO MUNDIAL

La Alta Comisionada, Louise Arbour, para lo Derechos Humanos en Colombia, presentó un nuevo informe en Ginebra (Suiza) ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU y destacó que los grupos armados ilegales "siguieron perpetrando actos de violencia y atemorizando a la población civil". Como nota sobresaliente afirmó que las FARC, ELN y Paramilitares o autodefensas no le prestaron ni el más mínimo de atención a las recomendación que les fue hecha.

Según el informe, la narcoguerrilla izquierdista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) y los paramilitares de ultraderecha de las Autodefensas Unidas de Colombia (Auc), son los "mayores responsables de la toma de rehenes, torturas y muerte de rehenes en su poder”. Lo ocurrido en Toribio y Jambaló, Cauca, la misma semana de presentación del informe es prueba de lo afirmado por la Alta Comisionada ante el mundo entero.

Todo parece indicar que a las Farc nada les importa el concepto y las recomendaciones de la ONU en materia de Derechos Humanos, los que ellos reclaman sean aplicadas a su favor pero que irrespetan cuando es su obligación atenderlos. De esa forma cada vez se alejan más de las posibilidades de un reconocimiento del estatus político por ellos reclamado insistentemente. La Organización de Naciones Unidas no podrá actuar mientras haya irrespeto y desconocimiento de sus recomendaciones dentro del conflicto interno colombiano.

Los pobladores se los municipios anotados aseguraron que los narcoguerrilleros dispararon explosivos entre ellos cilindros de gas indiscriminadamente al punto que destruyeron 50 viviendas, 10 totalmente, varios restaurantes y la Iglesia. Asesinaron 3 policías y una niña de 10 años. La escuela fue utilizada como trinchera para “protegerse” de los pobladores quienes solo usan como armas palos y piedras accionados manualmente. “El ataque no fue contra la Policía, sino contra la población civil”, afirmó uno de ellos.

Analistas extranjeros y nacionales coinciden en afirmar que las Farc busca una nueva vía para el tráfico de cocaína ya que por allí es fácil salir al pacifico y de allí al mundo. A las viejas guerrillas colombianas ya no les interesa la detención de los pueblos, sino el río de dólares que se desprende con la producción y tráfico de la cocaína. Esa es una de las causas por las cuales demuestran total desprecio por los derechos humanos cuando de cumplirlos en beneficio de las gentes que no están con ellos se trata. Cualquier condena de la ONU estaría justificada, advirtieron."