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Liberales a la lucha contra reelección

No cabe la menor duda que la persona de mayor prestigio y arrastre político que tiene el país se llama Alfonso López Michelsen. Al siguiente en el escalafón hay muchos escalones de diferencia. En este concepto incluyo todo los liberales, los conservadores, uribistas y los de Polo Democrático. Por los demás, están aún más bajo.

Ese prestigio no es gratuito, ya que López Michelsen ha tenido que soportar avalanchas por sus conceptos descarnados y francos, de fácil entendimiento, carente de rodeos y dobles intenciones. López es diferente a todos los políticos y politiqueros quienes primero piensan en su chequera, su estómago y luego su familia sin importarles nada el resto de colombianos.

El grito de batalla para las próximas elecciones ya lo dió y al él deberán unirse todos lo liberales: Hay que defender el imperio de la Constitución Nacional y derrotar al uribismo”. Creo que ese criterio no tiene doble interpretación. Es preciso, claro y tajante. Ante malsanas propuestas uribistas como las de irrespetar la Corte Constitucional, “El país debe reaccionar contra ese atropello”.

Ahora, mi pregunta es: ¿El liberalismo si está listo para actuar unido, despojarse de odios y tomar una sola bandera y una sola meta a alcanzar? En Santander se ven situaciones ponen a pensar a la gente que no hay disposición de todos. Hemos observado como “Ramoncito” que posa de director del partido acompaña a unos y ultraja a otros aspirantes dentro del mismo Partido Liberalismo. ¿Qué hacer?

Si quienes aseguran ser jefes no guardan neutralidad absoluta o apoyo igualitario frente a los candidatos al Senado y la Cámara, y actúan aumentando odios y distancias entre vertientes liberales, la propuesta de Alfonso López va a terminar siendo un fiasco. ¿Cómo debe reaccionar el país o un departamento frente a de estos?

López es un gran guía filosófico del Partido Liberal, no cabe la menor duda y está dispuesto a defender las ideas propuestas hasta el final, pero los demás “jefes” si tienen ese arraigo filosófico e interés de triunfo colectivo que hay en López Michelsen? Triunfo colectivo no el de uno o dos grupos. No puede volver a verse el triunfo de las pasadas elecciones que reclamó “Ramoncito” en Santander y que resultó ser la pérdida del 60% del terreno que era liberal.

La meta es que “El Partido Liberal tumbe al grupo sin escrúpulos que pretende la reelección manejada desde Palacio” y todos los liberales debemos tomarla como tarea propia y sin buscarle curvas, porque es un camino recto a seguir. Es el más enérgico criterio que el liberalismo ha esbozado en los últimos años y yo lo acepto. Adelante porque atrás asustan.

1 comentario

Guillermo serrano Prada -

la política es para las personas que están vivas, no para los difuntos, Turbay, lamentablemente ya no es de este mundo. Dejen que ese espacio lo ocupe alguien con ideas y futuro.