Peligrosos retos de Enrique Peñaloza
Yo no creo ni puedo admitir que el Partido Liberal se esté organizando para patrocinar acciones de fuerza o imposiciones arrogantes y prepotentes por parte de personas que aspiran a ganarse el favor popular de la colectividad. Me llamó poderosamente la atención las declaraciones del aspirante a la presidencia de la república, Enrique Peñaloza, cuando afirma se lanzará como liberal ("si me dejan") o como independiente ("si me obligan").
En otras palabras, la gente tiene que hacer lo que a él le parece o si no se va del partido el que a la h0ra de la verdad le importa un carajo, voltea la espalda y le da el rabo al partido del que aspira el aval. No le da campo al Partido Liberal raso de que opine porque él ya fijo las reglas del juego y tienen que ser así. La democracia y la participación de que él habla son solo en palabra. Para Peñaloza, la democracia consiste en que todos tienen hacer cola detrás de él porque de lo contrario me obligarían montar tolda aparte. Valiente liberalismo del señor.
Me da la espina de que a este ciudadano se le están subiendo los humos como ocurrió con Álvaro Uribe. Mucho apego mientras lograba los votos de los liberales a quienes después despreció con toda su alma y no les admite que opinen ni lo más mínimo. Peñaloza puede que sea un hombre capaz e inteligente pero está amenazando desde un principio a los electores y un fuetazo de eso no se lo aguanta la gente. De plano desconoce a los demás y solo es él para él , con la virtual o vaporosa idea que así se moderniza el Partido Liberal.
Con este tipo de imposiciones el país liberal debe tener mucho cuidado. La primera fue con Uribe y sirve para experiencia y no puede haber una segunda con Peñaloza porque eso sería ser sinvergüenzas. Además, es de los que quiere volver al partido liberal de centro, cosa que nunca ha sido ni será. Sus estatutos y dogma hablan de que es un partido de matices de izquierda. Es peligroso estar en el centro porque de ahí como lo hizo Uribe, saltó facilito a las ultra derechas estableciendo las discriminaciones que vivimos a favor de las cúpulas económicas y en contra el pueblo liberal. Las arrogancias y prepotencias no llevan a ninguna parte.
El momento no es para apuestitas insulsas de que si yo gano o si usted pierde. El momento ya tiene proyecciones fijas a seguir como las propuestas por Alfonso López Michelsen cuando señaló que el Partido Liberal tiene que evitar que Uribe gane en la primera vuelta. Esa meta no admite saltos al abismo al que si llega a caer el Partido Liberal deberá despedirse para siempre. La actitud de Peñaloza me parece irreverente con los electores y poco seria frente a la labor de unificación y concientización en que están empeñadas sus directivas. Así de sencillo.
Preguntas sobre ideas que me saltan al cerebro n la eventualidad que Peñaloza resultare escogido por el Partido Liberal como candidato a la Presidencia. ¿Utilizando qué doctrinas iría va a gobernar, las propias o a la liberal de matices de izquierda? ¿Cuál sería la participación de la base del partido liberal (obedecer y pagar impuestos solamente) si desde ya afirma que solo le interesan lo votos de ese partido advirtiendo todo sería manejado por sus amigos personales? ¿En otras palabras, lo liberales lo elegirán para que gobiernen otros? (señorcitos muy elegantes criados en la aristocracia y los clubes sociales). Hay cosas, muchas cosas, que no tienen claridad con el cuento de Pañaloza y como va es mejor que lo le jale al liberalismo.
En otras palabras, la gente tiene que hacer lo que a él le parece o si no se va del partido el que a la h0ra de la verdad le importa un carajo, voltea la espalda y le da el rabo al partido del que aspira el aval. No le da campo al Partido Liberal raso de que opine porque él ya fijo las reglas del juego y tienen que ser así. La democracia y la participación de que él habla son solo en palabra. Para Peñaloza, la democracia consiste en que todos tienen hacer cola detrás de él porque de lo contrario me obligarían montar tolda aparte. Valiente liberalismo del señor.
Me da la espina de que a este ciudadano se le están subiendo los humos como ocurrió con Álvaro Uribe. Mucho apego mientras lograba los votos de los liberales a quienes después despreció con toda su alma y no les admite que opinen ni lo más mínimo. Peñaloza puede que sea un hombre capaz e inteligente pero está amenazando desde un principio a los electores y un fuetazo de eso no se lo aguanta la gente. De plano desconoce a los demás y solo es él para él , con la virtual o vaporosa idea que así se moderniza el Partido Liberal.
Con este tipo de imposiciones el país liberal debe tener mucho cuidado. La primera fue con Uribe y sirve para experiencia y no puede haber una segunda con Peñaloza porque eso sería ser sinvergüenzas. Además, es de los que quiere volver al partido liberal de centro, cosa que nunca ha sido ni será. Sus estatutos y dogma hablan de que es un partido de matices de izquierda. Es peligroso estar en el centro porque de ahí como lo hizo Uribe, saltó facilito a las ultra derechas estableciendo las discriminaciones que vivimos a favor de las cúpulas económicas y en contra el pueblo liberal. Las arrogancias y prepotencias no llevan a ninguna parte.
El momento no es para apuestitas insulsas de que si yo gano o si usted pierde. El momento ya tiene proyecciones fijas a seguir como las propuestas por Alfonso López Michelsen cuando señaló que el Partido Liberal tiene que evitar que Uribe gane en la primera vuelta. Esa meta no admite saltos al abismo al que si llega a caer el Partido Liberal deberá despedirse para siempre. La actitud de Peñaloza me parece irreverente con los electores y poco seria frente a la labor de unificación y concientización en que están empeñadas sus directivas. Así de sencillo.
Preguntas sobre ideas que me saltan al cerebro n la eventualidad que Peñaloza resultare escogido por el Partido Liberal como candidato a la Presidencia. ¿Utilizando qué doctrinas iría va a gobernar, las propias o a la liberal de matices de izquierda? ¿Cuál sería la participación de la base del partido liberal (obedecer y pagar impuestos solamente) si desde ya afirma que solo le interesan lo votos de ese partido advirtiendo todo sería manejado por sus amigos personales? ¿En otras palabras, lo liberales lo elegirán para que gobiernen otros? (señorcitos muy elegantes criados en la aristocracia y los clubes sociales). Hay cosas, muchas cosas, que no tienen claridad con el cuento de Pañaloza y como va es mejor que lo le jale al liberalismo.
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